Ramon Casas y la residencia Casas-Carbó

Pintor, dibujante y diseñador, Ramon Casas fue uno de los artistas más emblemáticos del Modernismo catalán; fue también un miembro de la clase acomodada y, como muchos representantes de la alta burguesía barcelonesa, también quiso demostrar su opulencia construyendo una casa en el Passeig de Gràcia. El arquitecto Antoni Rovira i Rabassa -hijo del también arquitecto Antoni Rovira i Trias- fue el encargado de proyectar el edificio.

Proyectada en el año 1898, la residencia Casas-Carbó -que se sitúa en el número 96 del paseo- es un edificio modernista de planta baja y cuatro pisos, y en los bajos tuvo su taller el artista, mientras que en el resto de pisos había viviendas. En este edificio vivió también un cèlebre amigo de Ramon Casas y también un nombre importante del Modernismo, el pintor y escritor Santiago Rusiñol.

La residencia Casas-Carbó cuenta con una fachada de piedra tallada que muestra un esmerado trabajo escultórico, y con tribunas en el piso principal. También destacan los ornamentos de los balcones y la impresionante puerta de madera y forja. En la planta noble se conserva parte de la decoración original, con elementos de cerámica y forja, y una lujosa chimenea esculpida del decorador Josep Pascó. Desde este piso se accede a un espectacular patio interior desde el que se ve la fachada posterior de La Pedrera.

Durante muchos años, el edificio de la residencia Casas-Carbó acogió la famosa tienda Vinçon, dedicada al mobliario y objetos de diseño, y emblema del importante papel de Barcelona en el diseño.